El término fusión de identidad hace referencia a un sentimiento visceral de unidad con el grupo.
Para comprender este fenómeno en el que la identidad individual y grupal se fusionan por completo, es importante comprender que todas las personas tenemos la necesidad de desarrollar y crear una imagen o conocimiento de nosotros mismos, y para poder llegar a esa idea global del yo necesitamos incorporar tanto la identidad individual como la grupal.
¿Qué es la identidad grupal e individual?
Hablamos de identidad individual cuando hacemos referencia al conjunto de propiedades y atributos idiosincráticos que definen al individuo, mientras que si hablamos de identidad grupal hacemos referencia a esa imagen e idea global que tiene la persona, derivada del conocimiento de su pertenencia a un grupo social o grupos sociales.
Este fenómeno de la fusión de la identidad, está relacionado con un incremento de la porosidad y permeabilidad entre los límites de ambas identidades que incrementa a su vez, la probabilidad de que la identidad individual de la persona fusionada actúe e influya sobre la identidad grupal y viceversa.
Es algo parecido a como si, para una persona, el grupo fuese considerado una externalización de si mismo y sus objetivos y preferencias pasasen a ser las mismas.
En función de la naturaleza del grupo y del tipo de contacto entre sus miembros, se establecen diferentes tipos de lazos relacionales y se pueden distinguir dos tipos de fusión.
La fusión local es la más común, es aquella fusión de la identidad que se da en personas hacia grupos en los cuales, quienes lo conforman, mantienen relaciones personales muy estrechas y directas los unos con los otros, como por ejemplo el caso de la familia. Sin embargo, las personas también pueden fusionarse con grupos, donde en contacto entre los miembros del mismo es nulo o mínimo y los vínculos relacionales no se basan en interacciones personales, sino en una causa o valor común como es el caso de un país o un partido político; en este caso se hablaría de fusión extendida.
Principios que lo sustentan
Existen cuatro principios que recogen los aspectos más importantes que diferencian a la fusión de otras formas de unión con grupos
- Principio de agencia personal: las personas fusionadas perciben elevados niveles de agencia personal, es decir, sienten que tienen la capacidad de llevar a cabo y controlar comportamientos intencionados que influyen en el grupo. Consideran que las acciones que realicen a nivel individual, pueden tener consecuencias en el grupo.
- Principio de sinergia de la identidad: este principio recoge que la combinación de la identidad personal y social de los individuos hace que funcionen como una única identidad, de manera que la activación de cualquiera de ellas tendrá la misma respuesta.
- Principio de los lazos relacionales: según este principio, las personas fusionadas aceptan y consideran las diferencias que se pueden dar entre los miembros del grupo. Valoran a todos ellos tanto por sus singularidades como por el hecho de pertenecer al mismo grupo, lo que hace que la unión sea doble y los lazos relacionales que se creen sean muy fuertes.
- Principio de irrevocabilidad: este último principio señala que el vínculo de las personas fusionadas con el grupo permanece duradero y fijo en el tiempo, lo que hace más complicado que este mecanismo de fusión desaparezca.
¿Qué implicaciones tiene en el ser humano este fenómeno?
Si individuo y grupo se vuelven una única cosa , la amenaza a una de las dos partes ( individuo o grupo) desencadenará en el individuo el empeño de llevar a cabo esfuerzos compensatorios que reafirmen las identidades que han sido desafiadas y así de este modo, conseguirá reforzar y apoyar la sensación de fusión que defiende.
Uno de los objetivos bajo los cuales se desarrolló este concepto fue el de acercarse a comprender desde el punto de vista psicológico, porque algunos individuos estaban dispuestos a llevar a cabo acciones radicales tan extremas como el autosacrificio por su grupo.
En la actualidad, son diversos los sucesos de carácter radical que acontecen en nuestra sociedad generando un gran impacto, malestar y preocupación entre las personas que se preguntan, que conduce a ciertos individuos a cometer este tipo de comportamientos tan extremos. Bajo esta premisa, existen muchas lineas de investigación al respecto, entre ellas la de este fenómeno de “fusión de identidad” y todas ellas tratan de lograr una mayor comprensión de la dimensión social de la conducta radical ofreciendo la posibilidad de desarrollar planes de intervención que ayuden a reducir y eliminar este tipo de conductas y comportamientos que impactan de lleno en nuestra sociedad.
[Celia Herráez Delgado]
